ALIMENTOS QUE DEBEMOS CONSUMIR (ESPECIALMENTE MÁS) EN VERANO
Deberíamos comerlos todo el año, pero hay épocas en las que se vuelve más intensa la necesidad de ingerir según qué tipo de alimentos.
Y es que, por ejemplo, en verano, el cuerpo necesita un extra de hidratación, vitaminas y minerales para evitar los golpes de calor. Por no hablar de los efectos nocivos del sol, contra los que es posible luchar también desde el interior, consumiendo alimentos que, además de ayudar a broncearnos, nos protegen. ¿Qué hemos de comer en verano (al margen de la sandía y el melón, los reyes por excelencia de la temporada estival)?
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El pepino es ideal para estas fechas. Además de ser refrescante, depurativo y ayudarnos a reponer las vitaminas que perdemos con el calor, es bajo en calorías (16 calorías por cada 100 gramos), por lo que se convierte en el perfecto aliado de cara a la operación bikini. Una opción es consumirlo en forma de sopa fría, batiendo el pepino con ajo, cebolleta, aceite, sal y yogur griego.
Por otro lado, es interesante consumir hortalizas de colores vivos como la zanahoria, la lombarda, la remolacha, los pimientos, la lechuga, las espinacas, la rúcula o el tomate, que proporcionan al organismo, entre otros nutrientes, vitamina C y betacaroteno, que mejoran el aspecto de la piel y las mucosas y potencian el bronceado.
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Los frutos secos son siempre aconsejables por el Omega 3 que contienen, pero las avellanas, en concreto, nos ayudan en verano mucho más por su alto contenido en vitamina E, ideal para proteger la piel (y evitar las manchas del sol) y el cabello, que sufre especialmente en estas fechas por el cloro y la sal del mar. Además, en esta época del año, cuando los días son más largos, aportan energía entre horas para poder llegar al final de la jornada con las pilas a tope.
También el bonito contiene Omega 3 y es rico en minerales como el potasio, el hierro, el magnesio o el zinc, así como en proteínas. ¿La forma de consumirlo? Ya sea a la plancha o añadiéndolo a las ensaladas.
Y a esa ensalada también le podemos agregar aguacate, que tiene más potasio y magnesio que el plátano, ayudando a mantener el cuerpo en perfecto estado en los días de más sudoración.
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¿Y de postre? No podemos olvidarnos de las frutas, como las fresas o la piña. Y una refrescante manera de consumirlas es en forma de polo de hielo.
Estamos en verano. Y es tiempo de cuidarse y de comer adecuadamente.
Fotos: Instagram y Cordon Press
Saludos
Rodrigo González Fernández
Diplomado en "Responsabilidad Social Empresarial" de la ONU
Diplomado en "Gestión del Conocimiento" de la ONU
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Santiago- Chile