El vídeo mide un Ferrari 458 Italia, al que le han endosado un sistema biturbo Stage One con el que pasa a entregar 700 CV, con un Lamborghini Aventador de serie. Aunque me parece que es poco riguroso hacer pruebas en una autopista, (por aquello de la seguridad o el rigor) se ve que el doble turbo le va de perlas a "Il Cavallino". Puede que sea así, pero el vídeo que no es más que una publicidad de Underground Racing tambien comenta que el Aventador tendra sistemas de turboalimentación pronto. Habra que ver la locura que Underground Racing prepara con el Aventador, pero dadle que los 1.000 potros los rozará o los sobrepasará.